¿Quieres dejarle/a anonadado/a con tus artes amatorias? Prueba a prepararle una baño de placer… Sigue leyendo para que no te quedes sólo en el agua y jabón…

Baño espumoso: este es el básico pero increíble si añades unos toques especiales al agua caliente y al gel espumoso.

1. Adorna el cuarto con velas, incienso perfumado y música suave.
2. Ten la bañera preparada con máxima espuma cuando entre él/ella
3. Ya los dos desnudos, empieza enjabonándole la cabeza con un suave masaje capilar y con los ojos cerrados. Puedes emplear aparatos como el archiconocido “Orgasmatrón”, aunque con las manos resulta de lo más excitante.
4. Cuando ya esté de lo más relajado, respira profundamente , sumérgete y hazle sexo oral.

Baño Burbujeante: igual que el baño espumoso, pero utilizando bombas o bolas efervescentes que venden en diversos establecimientos de cosmética. Hay multitud de tipos de bolas distintas: desde perfumadas hasta con flores u otro tipo de sopresas dentro.

Baño Cleopatra: diluye leche de almendras en agua o rocía su cuerpo con tazones de leche muy lentamente. Luego pasa tu lengua por su cuerpo, deteniéndote donde más le guste.

Baño de Rosas: esparce pétalos de rosa en una bañera llena de agua caliente, a lo “American Beauty” y sigue los consejos que te comentamos más arriba en el baño espumoso. Para hacer más intenso la sensación a rosas, puedes elegir un aceite o jabón con este olor.

Baño de Champagne: en un baño espumoso, decora el ambiente de forma gamourosa (dorados, jazz…) y ten a mano dos copas de cava con una botella del mismo. Beban a la vez que se lo rocían por el cuerpo y se frotan con esponjas. La sensación de las burbujas y el chiporroteo sorprenderán a cualquiera