Es común entre las parejas el disgusto y el rechazo hacia el preservativo: “es más rico sin condón“, afirman. Pero viene el dilema del placer-sexo seguro, ¿qué hago?

Si tienes parejas ocasionales simplemente no puedes prescindir de él, y tampoco si no quieres tener hijos todavía con tu pareja estable. Mmm, a pesar de eso, “es más rico sin condón“…Sí, lo es; pero también puede serlo con él si sigues estas recomendaciones:

Tómate tu tiempo para comprarlo. Olvídate de la vergüenza y elige bien. Fíjate en la talla, los condones muy apretados reducen las sensaciones y se rompen con más facilidad; los grandes, pueden salirse con facilidad y la parte sobrante puede causar incomodidad en tu miembro. Si bien la talla estándar es de 18 cm de largo, existen marcas que ofrecen variedad de tamaños.

Experimenta con nuevos condones. Los condones convencionales son llanos, pero existen también condones con aditamentos en su diseño como espuelas, espirales y ribetes que aumentan la fricción en el glande durante la penetración. Gana ella y ganas tú.

Prueba con el condón de poliuretano. A diferencia de su par de látex, este condón hace elsexomás ardiente gracias a que transmite el calor corporal. Si quieres más calor, usa un condón de piel de cordero que se siente casi como si no llevaras nada. El inconveniente es que solo puede usarse para prevenir el embarazo, ya que su material poroso permite la transmisión de ETS’s.